Mientras en la bolsas de todo el mundo reina la euforia por la inyección de dinero irresponsable maquinada por los principales bancos centrales del mundo ( una medida que es pan para hoy y hambre para mañana como comprobaremos muy pronto) en la Academia, último baluarte de la humanidad, nos vemos una vez más abrumados por varias malas noticias, como suelen decir, las desgracias no vienen solas.
Más aliadas de Patrick Von Steiner, eran pocas y...
Vayamos por partes. Primero me encuentro con un artículo firmado por el infame y tres veces maldito Patrick Von Steiner en este blog, rescatado de algún cajón virtual en el que reincide en sus tonterías habituales como su patente y enfermiza obsesión con Japón, ¿qué la habrá hecho ese país?. Encerrado como está, vigilado las veinticuatro horas del día, es imposible que lo haya subido él. Así que tenemos uno de los escenarios que me temía, uno de sus seguidores descerebrados se ha propuesto mantener la llama tóxica de Planeta Inquietante viva a toda costa. Ya tengo agentes de confianza siiguiendo su pista, le espera una habitación con vistas al patio en una prisión. Quizás lo mande junto a su admirado líder para que vea la "entereza" conque afronta su actual situación.
La sanguinaria Jenna Starblade posa tras un nuevo recital de violencia.
Luego tenemos la segunda incursión en dos días de la hiperviolenta Jenna Starblade, que parece sacada de alguno de esos subproductos que almacena como oro en paño Steiner en su palacete. Sus víctimas esta vez fueron los encargados del transporte de componentes electrónicos valiosos a uno de nuestros principales centros de investigación en Alemania. Con la sutileza que uno cabría de esperar de esos homínidos asilvestrados en unos instantes cortaron la carretera en ambas direcciones, destrozaron los coches que custodiaban el convoy de camiones y desvalijaron la valiosa mercancia. Una vez más dejaron a modo de recuerdo sus apestosos carteles. La mayoría de los delincuentes ya han sido identificados, como era de esperar son colaboradores conocidos del suizo. De momento no queremos darles la publicidad que tanto ansían así que nos encargaremos de meterlos en cintura nosotros mismos, la Academia no necesita ayuda externa para librarse de una plaga de vulgares parásitos aunque los encabece un trasunto de Juana de Arco, cambiando Francia por un imperio multimedia del crimen organizado.
A estas dos muestras de barbarismo que me tenían profundamente irritado se vino a unir como guinda del pastel un anuncio de Caja Madrid que aparte de estar concebido por politoxicómanos reincidentes trata de retrasados a los clientes, lo cual me temo que no va desencaminado. Llamarle barrilete cósmico a un producto financiero me parece el colmo, como la limonada espacial.
Vivo en un mundo atestado de imbéciles recalcitrantes, si por mi fuera recuperaba a la Inquisición para hacer una limpieza a fondo.
Atentamente y con la esperanza de que mañana sea un mejor día, Sir Edward Holst.
No desperdicie el tiempo de sus pobres esbirros en buscar al responsable del rescate del olvido de ese texto del eminente preso político Patrick Von Steiner. Soy yo, un humilde ciudadano que aporta su grano de arena a la lucha contra la opresión ejercida de forma implacable por su corrupta organización.
ResponderEliminarHan cantado victoria antes de tiempo, su firma en el tratado de entrega de la humanidad a los diabólicos grises carece de cualquier tipo de validez y por eso jamás cesaremos en nuestro empeño para liberar a nuestro planeta.
Jenna Starblade es un faro de esperanza en la noche más tenebrosa de la humanidad, nos infunde aliento y nos guía de victoria en victoria que ponen de manifiesto que el gigante que vos habéis levantado tiene los pies de barro.
El nerviosismo empieza a impregnar sus textos, me llena de gozo ver como la balanza empieza a decantarse del lado del Bien.
A partir de ahora expondré la Verdad en los comentarios de esta bitácora, las veces que haga falta y recuerde, un día no muy lejano se sabrá lo que ocurrió en el desierto del Gobi.
¡Por Isis! ¡Libertad para Patrick!