Repasando en un momento libre los enlaces que consultaba el infame Patrick Von Steiner para rellenar de forma desvergonzada su cloaca digital he topado con dos artículos curiosos. En el blog dedicado a la cultura japonesa Pink Tentacle retoman aquel a priori descabellado proyecto de hacer naves espaciales de origami y nos muestran los primeros prototipos que han sido enviados a la oficina de la Agencia de exploración espacial japonesa(JAXA ) en Houston por la empresa Castem. La idea, atentos a la jugada, es llevarlos a la estación espacial internacional y tirarlos a la Tierra donde esperan que los que los encuentren contacten con JAXA. Sinceramente dudo mucho que sobrevivan al paso por nuestra atmósfera y en todo caso, harían mejor buscando en e-bay.
Uno de los origamis espaciales. Hagan sus apuestas, ¿llegará?
El otro artículo es una receta de cocina del escritor inglés Warren Ellis que me niego a traducir por su extensión y por la cantidad de expresiones malsonantes que emplea, todas ellas perfectamente gratuitas. Convierte una tarea aparentemente sencilla e inocua como preparar un puré de patatas con unos ajos asados en una escabechina bañada con cerveza de calidad. Es un ejemplo modélico del tipo de personaje que admira el crminal suizo. Esta receta es ideal para aficionados a la cerveza como es el caso del ilustre preso de la isla de Elba, a todos esos alcohólicos, bon apetit.
Atentamente, Sir Edward Holst.
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