En Las Pedroñeras nos alojaron en un antiguo hotel que ahora emplea el ayuntamiento para invitados. El interior tenía un aire al del Resplandor, lo que lo convierte en otro escenario ideal para una película. Este papel con las tarifas de la lavandería estaba en la puerta de todas las habitaciones y nos pareció una curiosidad reseñable.
La semana que viene volvemos a la programación habitual con las aventuras del investigador de lo desconocido, sus aliados y sus enemigos.
¡Coño! Un hotel de super-lujo. 400 € por un pantalón... y 100 euracos por una camiseta.
ResponderEliminarLa buena vida...