La nueva obra de Stephen Hawking ha vuelto a poner en la palestra la eterna discusión sobre Dios y he decidido poner mi pequeño grano de arena, un símil informático. Dice Hawking que las Leyes físicas explican por sí solas el Universo y que hace innecesario un Dios o dioses. Discrepo, las leyes físicas bien podrían ser limitaciones sólo aplicables a los habitantes naturales de este universo, los que nacimos y pululamos por este plano material. Igual que los usuarios de un sistema informática tenemos restringidos los permisos, hay cosas que podemos hacer y otras que nos están vedadas, igual que hay lugares inaccesibles. Otra razón esgrimida contra las divinidades es que los milagros que se les atribuyen violan por definición las leyes de la física, yo creo que no les afectan. Al igual que un administrador no está limitado y puede hacer y deshacer a su antojo así imagino al dios o dioses, allí donde para nosotros hay barreras infranqueables para ellos hay caminos abiertos. Los profetas, enviados... serían usuarios con permisos especiales, que les darían un mayor dominio que al común de los mortales. Dejo aquí está propuesta abierta para la discusión y el análisis. Después de todo no es nada descabellada pues nuestra realidad bien podría ser una simulación y ser todos bits en continuo movimiento.
¡Por Isis!
¿Me está diciendo usted que existe la posibilidad de que todos nosotros, y el Universo que conocemos, no sean más que un juego de diversión, como una granja de hormigas? En ese caso, ¿podríamos enviarle un mensaje a nuestro creador para que sepa que nosotros sabemos de su existencia, y así, esperar su respuesta, lo que confirmaría de una vez por todas, su existencia?
ResponderEliminarAsí como hay incontables pruebas de la presencia de alienígenas en nuestro planeta desde el pasado más remoto hasta el presente también hay innumerables mensajes atribuidos a Dios, a los dioses, al administrador del cosmos...La cuestión es cómo determinar su validez, ¿cómo saber si su origen es divino o humano? ¿Qué haría falta para que no cupiera duda alguna sobre su autoría? Nuestros creadores, los miembros de la Expedición Delos, eluden dar una respuesta clara sobre este tema, dicen que debemos buscarla pues se trata de un proceso, una prueba que debemos pasar para alcanzar la madurez como especie.
ResponderEliminar¡Por Isis!