Dos mentes complementarias con una meta común.
Una risa franca y sincera es lo que causó mi lectura de la osada entrada de los grisecitos. Un juego de manos, delante de sus ojos alienígenas, y no sólo no lo vieron sino que se regodean de habernos espiado. Pues claro que nos fotografiasteis muchachos, ¿por qué creéis que escogí un lugar abandonado, medio derruido, a la vista de cualquiera? Para que nos encontrarais y así poder hacer lo propio con vosotros. Sí, sabemos dónde estáis escondidos y no os molestéis en mudaros de charca, os seguiremos la pista y localizaremos la nueva guarida con la misma facilidad. No entendéis que la unión hace la fuerza, dos mentes brillantes juntas pueden hacer maravillas que por separado estarían fuera de su alcance. Así, junto a mi aliada, la eficaz Ellen Blackmoon, y un escogido grupo de fieles luchadores, me dirijo a vuestro escondrijo para empezar la batalla que pondrá fin a la nefasta Operación Kraken. ¡En guardia, malandrines!
¡Por Isis!
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