Tras un descenso no exento de complicaciones, hemos logrado cruzar el portal, no sin antes derribar los puestos de vigilancia de los híbridos. Al otro lado de momento no hay nada especialmente reseñable, todo parece una imitación burda de la Atlántida y estoy convencida de que toda esta dimensión junto al portal son una trampa diseñada por la Academia para capturar a Patrick Von Steiner. Nos dirigimos a toda velocidad al punto en el que se encuentra la anterior expedición de rescate. Sin más me despido hasta la próxima entrada.
¡Por Isis!, Gwen Marsters.
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