sábado, enero 25, 2014

Ratas a la deriva

En esta ocasión el titular no se refiere a la caduca Academia, aunque la noticia es una metáfora de su lamentable situación. Se trata de un buque, el Lyubov Orlova, que navega a la deriva por el Atlántico lleno de ratas que se comen entre ellas para sobrevivir y su azaroso destino podría ser el Reino Unido. Construido en Yugoslavia en 1976, fue abandonado en un puerto de Canadá por sus dueños al no poder afrontar sus deudas. El año pasado las autoridades canadienses, incapaces de venderlo, lo soltaron en aguas internacionales con la excusa de que no causara daños en su medio ambiente. El del resto del mundo no pareció importarles, por no mencionar que esa visión compartimentada de la naturaleza es absurda, la contaminación no entiende de fronteras y aduanas. Tras algún esporádico avistamiento, se creyó que se había hundido, pero ahora vuelve a las portadas de los periódicos, empezando por The Independant, por su preocupante cercanía a la costa del Reino Unido. No me extrañaría lo más mínimo que nuestros enemigos intenten usar este navío lleno de ratas caníbales para sus nefarios fines.

¡Por Isis!

1 comentario:

  1. ¡Menuda ratada!, tanto por la nueva "tripulación" como la acción de las autoridades canadienses que debieran haberlo hundido antes que dejarlo como peligrosa amenaza para la navegación de otros buques. el final de estos buques es la subasta judicial en puerto a la qe acuden postores que lo quieren para su desgüace.
    Muy buena y sugerente este "Planeta inquietante".... ¡Enhorabuena!
    Carlos Pardo

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