El 2022 empieza movido, a la ameneza que están investigando Arya Darkstorm y el Capitán Neyyan Skyssain, se suma la nueva estratagema de la red cibercriminal Elysium. Tras la batalla de los Monolitos era evidente que volveríamos a saber de ellos. El éxito de los mutantes al completar el ritual no se ha traducido en su ansiada singularidad. Ese fracaso les ha devuelto los pies a la Tierra y parece que les ha dado de momento una motivación más material, ganar dinero como sea. Aunque sospecho que esa no es la única motivación tras su nuevo plan. ¿Y de qué se trata? De NFTs. Era evidente que acabarían apareciendo por esta bitácora. Los token no fungibles son la nueva fiebre del oro, tras las criptomonedas. Es algo que nos afecta a todos aunque no participemos pues generar un NFT requiere en general de un consumo tanto de capacidad computacional como de energía eléctrica, por algo que no deja de ser el certificado de propiedad de algo que puede copiar cualquiera. Es más, el NFT solo apunta a una url donde está ahora la imagen, el vídeo o lo que sea el contenido, pero no garantiza que mañana o el año que viene siga ahí.
Los miembros de Elysium han entrado de lleno en el mercado de los NFTs creando los suyos propios y comprando de otra gente, con el evidente ánimo de sacar dinero rápido. Pero sospecho que esa avaricia es tan solo la proverbial punta del iceberg. Tanto los NFTs como las criptomonedas se basan en hacer cálculos complejos para añadir bloques a una cadena (blockchain), esos cálculos no tiene más objeto a priori que ser una prueba de su validez, una forma de descartar spam por así decirlo. Pero, ¿y si Elysium está usando sus NFTs para resolver problemas reales? Es decir, que esté usando esta minería mundial para dar pasos hacia su ansiada singularidad. Podría estar añadiendo recursos por todo el mundo de gente que atraída por la promesa de dinero fácil, pone sus recursos al servicio de Elysium, sin pararse a pensar qué están haciendo sus ordenadores. No hace falta explicar que ya estamos investigando los NFTs de Elysium. El ciberespacio nunca duerme, como mi querida Nueva York.
No hay comentarios:
Publicar un comentario