"Nuestro Señor derrotó al mal" es la impactante inscripción de un amuleto cristiano del siglo V encontrado en Anatolia que representa al rey Salomón a caballo, atravesando al diablo con una lanza. En la otra cara del amuleto aparecen los nombres de cuatro ángeles, que deben ser Azrael, Gabriel, Miguel e Israfil. Este magnífico hallazg arqueológico es un recordatorio de la importancia que ha tenido siempre la lucha continua contras las Fuerzas del Mal, y cómo aquellos que le han plantado cara son recordados, convirtiendo su imagen en un símbolo de esa lucha. El Rey Salomón es un referente para los investigadores de lo desconocido por su sabiduría y por su hazañas. Por eso mismo la corrupta y decadente Academia hace lo posible para reducirlo a ficción, a cuento infantil, pues sabe que su Historia es más poderosa que la historiagrafía gris oficial, que aburre hasta al que la redacta.
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